Durante 18 meses de trabajo del subcomité técnico de la FIFA se esforzó en lograr unas reglas de juego más comprensibles y adaptadas al fútbol actual. Son Reglas más breves, tras haberse eliminado 10.000 palabras, pero con una claridad mucho mayor, (al menos esa es la intención) para que todo el mundo entienda las decisiones que toma un árbitro. El objetivo es hacer unas reglas más justas y fomentar el juego limpio. Se trata de evolucionar sin involución por el bien del propio fútbol.
Pero vayamos a las modificaciones más importantes:
Anteriormente si un futbolista suplente o sustituido entraba al terreno de juego e intervenía en el juego, la sanción técnica no podía ir más allá de un tiro libre indirecto, salvo si era para evitar una ocasión manifiesta de gol. Si era un miembro del cuerpo técnico, solo cabía reanudar el juego con un balón a tierra, al igual que si se producía esa intervención por parte de un jugador expulsado. Es decir; intentar evitar un gol, salía “muy barato”. Ahora con la nueva modificación si se produce esa interferencia, sea de un miembro del cuerpo técnico, sustituto, jugador sustituido o futbolista expulsado el juego se reanudará con un tiro libre directo o penalti.
Otro cambio significativo concierne a la equipación; antes un futbolista que tenía que salir del terreno de juego para poner en orden su equipamiento, (por ejemplo; si se había manchado la camiseta de sangre y debía cambiarla) para volver a entrar al terreno de juego tenía que esperar a que el juego estuviese detenido con la consiguiente incomprensión de todos, que en algún caso ocasionó más de una situación complicada y ahora, con buen criterio, se adopta la decisión de que el futbolista podrá entrar al terreno de juego una vez revisado el equipamiento por un miembro del equipo arbitral, sin necesidad de que el juego esté detenido.
Otro cambio significativo se produce cuando un futbolista, que recibe una entrada de un adversario que supone una sanción disciplinaria para éste, si el jugador objeto de la infracción necesita que entren las asistencias al terreno de juego, no deberá abandonar el terreno de juego. Es decir, se considera injusto que un jugador lesionado por la infracción de que ha sido objeto, solo en el caso de que la acción cometida suponga una sanción disciplinaria para el infractor, deba salir del terreno de juego cuando tiene que ser atendido, porque lo que generaba anteriormente era una ventaja numérica del equipo que cometió la infracción. Pero bien entendido, que ello no suponga una atención que se prolongue en el tiempo, porque, si es así, deberá abandonar el terreno de juego con el fin de no retardar en exceso la reanudación del juego.
Si un segundo balón, un objeto o un animal entra en el terreno de juego y la jugada acaba en gol, el tanto será concedido incluso si se produce el contacto con el balón antes de entrar en la portería. En la anterior redacción, al producirse el contacto con el balón el árbitro se veía obligado a detener el juego sin conceder el gol y reanudar el juego con un balón a tierra. Ejemplo: que un balón se lanzase desde la grada e impactase en el balón con el que se juega el partido, pero pese a ello, el balón acaba entrando en la portería.
Otra modificación que necesitaba una adaptación distinta y que obligaba al árbitro a repetir el saque de centro, se refiere a que el balón estará en juego cuando se mueve claramente, pero sin necesidad de que dicho saque sea realizado hacia adelante.
Una innovación más hace referencia al mismo número de futbolistas de un equipo y otro durante los lanzamientos de tandas de penaltis. Es decir, si antes de la ejecución de los tiros o durante los mismos (modificación) un equipo tiene más jugadores que el adversario deberá reducir su número para equipararlo con el de su adversario, con el fin de que un equipo no pueda beneficiarse al tener menos lanzadores que su rival, ya que esto podría implicar que su “mejor lanzador” ejecutara un segundo tiro, mientras que el otro equipo no tendría esa oportunidad, hasta que no hubieran lanzado todos los que debían hacerlo.
En la regla del fuera de juego se producen algunas variaciones con el fin de dotar a esta regla de una adaptación más práctica. Sirva de ejemplo un dato; se ha eliminado que, a efectos de determinar el fuera de juego, la salida de un jugador por cualquier motivo del terreno de juego, lo que significa que no está incluido cuando se hace por lesión, por cuanto era incomprensible e injusto que este hecho habilitara la posición de los adversarios. La nueva formulación define el final de la fase del juego en la que ya no se considera que el defensor está en el terreno de juego a efectos de determinar la existencia del fuera de juego.
En cuanto a la regla 12, la denominada CÓDIGO PENAL de las reglas de juego, dentro de las modificaciones, las faltas sancionadas con tiro libre directo pasan de 10 a 11.
Cuando el árbitro deba aplicar la ventaja, al existir una clara oportunidad de gol, por una infracción de tarjeta roja, como puede ser por juego brusco grave o una segunda amonestación, el árbitro deberá expulsar al infractor cuando el balón deje de estar en juego, pero, si el jugador disputa o interfiere al adversario, el árbitro detendrá el juego para expulsar al jugador y reanudará el juego con un tiro libre indirecto. No sería justo que un equipo que debe tener un jugador menos se pueda aprovechar en la siguiente acción de contribuir en marcar un gol para su equipo o evitar que lo pueda hacer el rival.
Ocasión manifiesta de gol, el llamando triple castigo para jugadas dentro del área de penalti: cuando un jugador del equipo defensor comete una infracción que malogra una oportunidad de marcar un gol en el área de penalti, el penalti compensa efectivamente la oportunidad de marcar gol, por lo cual la penalización al jugador debe ser menos severa (tarjeta amarilla) que cuando se comete la infracción fuera del área de penalti, pero reducido al intento de disputar el balón, sirva de ejemplo cuando se trata de una infracción por mano o cuando claramente no hay un intento de jugar el balón o disputarlo (según se define en la formulación), el jugador será expulsado. Sin duda este último párrafo no alejará la polémica de la decisión que tenga que tomar el árbitro en aplicación de esta disposición.
El hecho de que dos futbolistas rivales salgan del terreno de juego por una acción directa, por ejemplo por la inercia y que uno de ellos cometa una falta sobre su rival fuera del terreno de juego, la infracción se reanudará desde la misma línea de demarcación más cercana a donde se produjo. Anteriormente al ser cometida la falta fuera del terreno de juego, si el árbitro detenía el juego ser reanudaba con un balón a tierra.
Cometer una infracción dentro del terreno de juego contra un compañero de equipo, sustituto, futbolista sustituido, miembro del cuerpo técnico o miembro del equipo arbitral, la sanción en lugar de tiro libre indirecto, será sancionado con la nueva formulación con tiro libre directo, con el fin de sancionar la gravedad de la acción, para no transmitir un mensaje de debilidad.
En cuanto a la regla del penalti se unifica el criterio de aplicación en los siguientes tres casos, en los que la reanudación del juego será tiro libre indirecto desde el punto penal independientemente de si se marcó gol o no:
Penalti ejecutado hacia atrás.
Penalti ejecutado por un jugador distinto al identificado, siendo además amonestado.
Realizar una finta al patear el balón habiendo ya finalizado la carrera (durante la misma están permitidas); el árbitro amonestará al ejecutor.
Además si el guardameta es el responsable de la repetición de un penalti, deberá ser amonestado.
En cuanto al saque de banda, no respetar la distancia de 2 metros se considera una distracción u obstaculización ilegal y se concederá un tiro libre indirecto para reanudar el juego, si dicho saque ya había sido ejecutado.
Félix Sánchez Marcos
Director Técnico CTA FCYLF
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